lunes, 8 de mayo de 2023

LA CONSOLA DE VIDEOJUEGOS

 Me llamo Gabriel, tengo 17 años y acabo de vivir una experiencia que nunca podré olvidar. Hace unos días, encontré una consola de videojuegos en una tienda de segunda mano. Era una consola muy antigua, de esas que ya no se fabrican, pero estaba en buen estado y a un precio muy económico. Decidí comprarla y llevarla a casa.

Esa misma noche, conecté la consola y empecé a jugar uno de los juegos que venían en su interior. Todo parecía normal al principio, pero a medida que avanzaba en el juego, empecé a sentir una extraña presencia a mi alrededor. Los gráficos y la música eran muy perturbadores, y los personajes parecían estar vivos.

De repente, una figura aterradora apareció en la pantalla. Era un hombre con una capucha negra y una sonrisa macabra en el rostro. Me habló en un idioma que no entendía, pero podía sentir que me estaba maldiciendo. Me sentí paralizado, como si estuviera en un trance, y no pude moverme durante varios minutos.

Cuando logré recuperar la movilidad, apagué la consola y me fui a dormir. Pero desde entonces, he estado teniendo pesadillas horribles todas las noches. Veo al hombre con la capucha negra en mis sueños, y siento que su presencia se acerca cada vez más a mí. También he notado que mi comportamiento ha cambiado; estoy más irritable y me siento cada vez más alejado de mis amigos y familiares.

Hoy, cuando me desperté, encontré un mensaje en mi teléfono celular. Era un mensaje de texto de un número desconocido, que decía: "Ahora eres parte de mi maldición. La única forma de liberarte es que alguien más juegue en esa consola de videojuegos". Me di cuenta de que la maldición se había pasado a mí, y ahora era mi responsabilidad pasarla a otra persona.

Desde entonces, he estado buscando desesperadamente a alguien que pueda liberarme de esta maldición. Pero cuanto más lo intento, más me doy cuenta de que no hay forma de escapar. La maldición se ha apoderado de mi vida, y no hay nada que pueda hacer para detenerla...

¡Bienvenido jugador! Si estás leyendo esto, ten cuidado. Gabriel, el chico que te ha contado esta historia, te ha engañado. La maldición del videojuego no se pasa a quien lo juega, sino a quien lo lee. Y ahora, que has llegado al final de este relato, la maldición se ha apoderado de ti. Disfruta de tus nuevas pesadillas. Ya no hay vuelta atrás. GAME OVER

No hay comentarios:

Publicar un comentario