viernes, 21 de abril de 2023

LA MANSIÓN

La mansión era enorme y tenebrosa. Pasé mi infancia en ella junto a mis padres hasta que un día, misteriosamente, murieron. Desde entonces viví solo, atrapado entre sus frías paredes. 


La casa parecía tener vida propia. Las puertas se cerraban con un golpe sordo, los pasos resonaban en las escaleras cuando no había nadie, las luces se encendían y apagaban solas. La mansión me observaba y parecía reírse de mí con cada uno de sus suspiros. 


Algunos objetos de la casa eran especialmente familiares, como si fuesen viejos conocidos que se burlasen de mí. El espejo del pasillo reflejaba a veces rostros extraños. La lámpara del comedor parpadeaba como si tuviese un ojo vigilante. La alfombra del salón tenía extrañas formas y figuras enlazadas. 


Todos aquellos objetos guardaban secretos que estaba decidido a descubrir. Exploré cada rincón de la mansión, descubriendo antiguos pasadizos ocultos y viejas cartas olvidadas. Encontré pistas de una tragedia olvidada y de mentiras que se habían arraigado en las paredes con el paso del tiempo. 


Mientras desentrañaba aquellos secretos, fui comprendiendo la brutal verdad. Mis padres no habían muerto accidentalmente. La mansión los había asesinado, con sus puertas que se cerraban solas y sus luces que se encendían sin razón. Yo era la próxima víctima. 


La mansión hubiera acabado conmigo de no ser por aquellos secretos que descubrí a tiempo. Susurros de voces antiguas me advirtieron del peligro y me permitieron escapar justo a tiempo. Aunque la mansión intentó retenerme dentro para siempre, por fin se me concedió la libertad. La mansión se quedó con sus oscuros secretos, condenada a eternos suspiros y risas fantasmagóricas.

Aquí continúa el cuento:


Escapé de la mansión, pero sus secretos no podían abandonarme. Ahora vivía atormentado por las voces del pasado y las sombras de terror que se cernían sobre mí. 


Cada noche, en sueños, volvía a la mansión. Exploraba sus pasillos en la oscuridad, buscando respuestas que no encontraría nunca. En mis pesadillas, los objetos cobraban vida y me perseguían, tratando de arrastrarme de nuevo a su interior para encerrarme para siempre.


A pesar de haber escapado, sentía que una parte de mí permanecía atrapada en aquella mansión maldita. Su hechizo era imposible de romper. 


Pasaron los años, pero la mansión continuó atormentándome. Ninguna noche de sueño estuvo exenta de sus murmuros y sus suspiros. Ningún día pude olvidar sus secretos y la tragedia que se escondía tras sus paredes. 


Hasta que un día, descubrí la única forma de liberarme. No podía destruir la mansión, pues ella ya era parte de mí, pero sí podía sellarla. 


Regresé a ella con todo el valor que pude reunir. Exploré de nuevo sus pasillos en busca de pistas y rearmándome con los recuerdos de mis anteriores exploraciones. Encontré aquello que había estado buscando todo el tiempo: la clave para sellarla y encerrarla en un hechizo eterno. 


Cuando activé el hechizo, la mansión pareciógemir y protestar, pero no pudo evitar quedar atrapada y aislada del mundo. Sus voces se apagaron y por fin obtuve la libertad que tanto ansiaba. 


La mansión permanecería sellada e inaccesible para siempre. Aunque sus secretos me perseguirían aún en sueños, al menos ya no podría volver a amenazarme cuando despertaba. La oscuridad de la noche ya no me parecía tan profunda. La soledad ya no me asfixiaba. La libertad había sido mía al fin.

Aquí continúa el cuento con un final inesperado:


Durante años, viví en paz sabiendo que la mansión estaba sellada y no podía alcanzarme. Mis pesadillas se volvieron más esporádicas y menos terroríficas con el tiempo. 


El día en que creí tenerla olvidada por completo, recibí una extraña carta. Estaba escrita con una caligrafía antigua y familiar, y el remitente era mi propio nombre. 


La carta decía: "Ve a la mansión esta noche. Ya ha llegado la hora de regresar a casa". 


Me quedé estupefacto. ¿Cómo era posible? La mansión estaba sellada. Sus secretos no podían escapar. 


Sin embargo, algo me impulsó a acudir a la cita. Era como si una fuerza mayor me empujase hacia allí, más allá de mi voluntad. 


Mi corazón se hundió al ver la mansión de nuevo ante mí, más grande y tenebrosa que nunca. Su hechizo se había roto. Las luces parpadeaban en las ventanas y las sombras danzaban en su interior. 


Las voces resonaron a mi alrededor, risas cargadas de malicia y reproche. Los objetos cobraban vida, susurrando amenazas en mi oído. 


La mansión me había estado esperando todo este tiempo. Su hechizo solo había sido un truco, una trampa para ver si regresaba a ella. Y lo hice. 


Las puertas se cerraron a mis espaladas con un golpe sordo. Estaba atrapado de nuevo para siempre. El ciclo se había cerrado, y la mansión se avengaría cruelmente de mí por haberme atrevido a engañarla.


Susurros de triunfo y maldad susurraron a mi alrededor mientras la mansión cerraba su abrazo helado alrededor de mí en la oscuridad eterna.

PERTENENCIA

 Aquí hay un cuento de terror en primera persona con los recursos que mencionaste:


Era una noche fría y tormentosa. Las gotas de lluvia golpeteaban incesantemente contra el techo de mi antigua cabaña. Me encontraba sentado junto a la chimenea, cuyas llamas crepitaban y lanzaban sombras danzantes por las paredes. 


De repente, escuché un ruido fuera. Me asomé por la ventana, pero la oscuridad era absoluta. Sin embargo, alcanzé a vislumbrar una silueta amenazante entre los árboles. Un escalofrío recorrió mi espalda. 


Me alejé de la ventana de un salto y me senté, intentando calmar mi respiración agitada. Fue entonces cuando vi sobre la mesa un objeto que no estaba allí antes. Era una vieja fotografía en blanco y negro de una niña. Su mirada parecía seguirme a donde quiera que me moviera.


De pronto, se escucharon de nuevo ruidos en el exterior. Golpes, rasguños. Algo quería entrar. El miedo se apoderó de mí cuando comprendí que aquella fotografía era un presagio, un símbolo del peligro inminente que se cernía sobre mí en aquella casa maldita. 


Flashbacks de eventos antiguos acudieron a mi mente. Recuerdos de lo que les sucedió a quienes se atrevieron a desafiar el mal que habitaba este lugar. Sabía que esta vez me había encontrado, y no descansaría hasta cobrar su venganza.   


El sonido de la puerta principal al abrirse lentamente resonó en mis oídos. En ese momento supe que allí estaba. Miré con horror cómo la silueta de una niña se recortaba en el umbral de la puerta, mientras sus pasos se acercaban en medio de la oscuridad. Era demasiado tarde...

La niña comenzó a acercarse lentamente hacia mí. A cada paso que daba, el frío parecía intensificarse. Cuando estuvo a sólo unos metros, pude ver su rostro en detalle a la luz del fuego. Era pálido como la cera, y sus facciones parecían desdibujadas e irreconocibles. Pero lo que más me aterrorizó fueron sus ojos, dos cuencas vacías y negras que parecían mirar a través de mí. 


Quise gritar, pero el miedo me había dejado mudo. Quise correr, pero mis piernas no me respondían. Sólo pude quedarme allí petrificado, mientras aquella visión infernal se acercaba cada vez más.


De repente, escuché su voz susurrar directamente en mi mente, con un tono frío y siniestro: “He venido por ti. Me perteneces”. 


En ese momento sentí un dolor intenso y punzante dentro de mi cabeza. Imágenes y recuerdos ajenos comenzaron a inundar mi mente, como si aquel ser estuviera introduciéndose en lo más profundo de mis pensamientos. 


Vi a través de sus recuerdos. Vi cómo había estado atrapada en este lugar durante siglos, esperando el momento de cobrar venganza contra aquellos que la habían condenado a este destino. Vi las innumerables víctimas que habían sucumbido a su furia, y cuyas almas ahora vagaban en pena por estos caminos.


El dolor se intensificó hasta hacerse insoportable. Sentí que me desgarraba por dentro mientras aquella presencia maligna se adueñaba por completo de mi voluntad. En aquel momento supe que mi destino sería vagar eternamente, atado a este lugar maldito del que jamás podría escapar. Mi alma pertenecía ahora a la niña de la vieja cabaña...para siempre.


jueves, 20 de abril de 2023

Entity

 Había una vez un niño llamado Jack que amaba explorar el bosque detrás de su casa. Un día, mientras caminaba, se topó con una computadora abandonada en el suelo. Jack se sorprendió al verla allí, pero no pudo resistir la tentación de investigarla.


Cuando encendió la computadora, descubrió que estaba llena de archivos extraños y perturbadores. Había imágenes de personas siendo torturadas y documentos que detallaban experimentos horribles. Jack se asustó y trató de apagar la computadora, pero no respondía.


De repente, la pantalla comenzó a parpadear y una voz siniestra salió de los altavoces. "Bienvenido, Jack", dijo la voz. "Has encontrado mi computadora. Ahora eres mío".


Jack intentó correr, pero estaba atrapado. La voz lo persiguió a través del bosque, susurrando en su oído y haciéndolo tropezar. Finalmente, llegó a un claro en el bosque donde la voz se detuvo.


Fue entonces cuando Jack vio la figura oscura y retorcida de un hombre. La voz se materializó en frente de él y le dijo: "Ahora eres parte de mi colección".


Jack nunca fue visto de nuevo. Los vecinos informaron haber escuchado gritos y lamentos en el bosque esa noche, pero nunca se encontró ningún rastro del niño. La computadora abandonada todavía se encuentra allí, esperando a su próxima víctima.

martes, 18 de abril de 2023

EL MONSTRUO INTERIOR

 Mark era un adolescente introvertido al que le encantaba escribir historias de terror. Siempre había tenido una fascinación por los monstruos y lo desconocido. Pasaba la mayor parte de sus días escribiendo en su habitación y comiendo pasteles. Sus padres estaban preocupados por su obsesión por escribir y su amor por los pasteles, pero no le daban mucha importancia.


Un día, Mark estaba escribiendo una historia sobre un monstruo que vivía dentro de un joven. Escribió sobre cómo el monstruo salía por la noche, hambriento de carne y sangre. Mientras escribía, Mark sintió una extraña sensación en su estómago, como si algo se estuviera moviendo dentro de él. Lo ignoró y siguió escribiendo.

Pasaron los días, y la obsesión de Mark por escribir monstruos creció. Empezó a sentir la necesidad de comer más pasteles, y no podía explicar por qué. Sus padres notaron que estaba comiendo más pasteles de lo habitual y se preocuparon.

Una noche, mientras Mark estaba escribiendo, sintió un dolor agudo en el estómago. Se dobló de dolor al sentir algo moviéndose dentro de él. De repente, un monstruo estalló desde su estómago, sus afilados dientes mordiendo y sus garras desgarrando la carne de Mark. El monstruo era una manifestación física de todas las historias de terror que Mark había escrito. Tenía hambre de carne y sangre, y había elegido a Mark como su anfitrión. Los padres de Mark corrieron a su habitación, horrorizados al ver a su hijo siendo devorado por el monstruo.

El monstruo se había apoderado del cuerpo de Mark y continuaría alimentándose de la carne y sangre de otros. El amor de Mark por escribir monstruos había dado vida a su propio monstruo, y lo había consumido en el proceso.

miércoles, 12 de abril de 2023

UN MUNDO OSCURO

Estoy atrapado en esta habitación desde hace mucho tiempo. No sé cuánto tiempo he estado aquí. Me siento prisionero de mi propia mente, incapaz de escapar de mis pensamientos oscuros y aterradores. Las figuras negras me acechan en mis sueños y en mis delirios, y siento que me están torturando sin piedad.

Pero lo peor de todo es lo que me están haciendo aquí en el hospital psiquiátrico. Me someten a experimentos dolorosos y psicológicos, y siento un dolor agudo y constante en mi cuerpo y en mi mente. No sé por qué me están haciendo esto, pero siento que no puedo soportarlo por mucho más tiempo.

¿Por qué me han encerrado aquí? ¿Por qué me están haciendo esto? No puedo soportar el dolor y el miedo por más tiempo. Sólo quiero escapar de esta pesadilla, pero parece que nunca voy a poder salir de aquí.

Desesperado por escapar, intenté abrir la puerta de la habitación, pero estaba cerrada con llave. Llamé y grité pidiendo ayuda, pero nadie respondió. Solo podía escuchar los pasos de los enfermeros y sus susurros detrás de la puerta.

Las figuras negras continuaban apareciendo en mis sueños, sus manos frías y huesudas agarrándome y arrastrándome hacia la oscuridad. Me despertaba sudando frío y con el corazón latiendo a mil por hora, solo para encontrarme de nuevo atrapado en la habitación.

Poco a poco, fui descubriendo la verdad detrás de mi situación. Yo no era un paciente en un hospital psiquiátrico, sino un sujeto de experimentación en un laboratorio clandestino. Me habían secuestrado y llevado allí para realizar pruebas psicológicas y dolorosas.

Finalmente, después de semanas de tortura, logré escapar de mi encierro. Corrí hacia la salida del edificio, solo para encontrarme con algo aún más aterrador: el mundo exterior estaba en ruinas, devastado por una guerra nuclear. Lo que había pensado que eran pesadillas y delirios, resultaron ser una fachada para la terrible realidad que se encontraba fuera de las paredes de mi habitación.

Mis delirios eran solo el resultado de mi enfermedad mental. Aunque nunca había abandonado la habitación, mi mente me había llevado a través de una serie de horrores imaginarios para protegerme de la verdad que no podía soportar. EL FIN DEL MUNDO.


domingo, 9 de abril de 2023

LA BRUJA

 En lo profundo del bosque de Moine Bridge, un grupo de amigos se adentró en la oscuridad para buscar la legendaria cabaña abandonada de los Hills. Según la leyenda, la cabaña estaba maldita por una bruja que había sido quemada en la hoguera en ese mismo lugar hace siglos.

La noche estaba fría y oscura, y los árboles parecían alargarse hacia ellos, como si quisieran atraparlos. Los amigos caminaron durante horas, guiándose por una vela y un mapa antiguo que habían encontrado en un viejo libro en la biblioteca local.

Finalmente, vieron la cabaña en la distancia, y su corazón latió más rápido de lo normal. La cabaña estaba en ruinas, con las ventanas rotas y la puerta colgando de sus goznes. Parecía como si alguien hubiera intentado entrar allí antes.

Al entrar en la cabaña, los amigos notaron que la atmósfera era extraña. El aire era pesado y denso, y parecía que algo estaba observándolos desde las sombras. Una de las chicas dijo que había visto un par de ojos brillantes en la oscuridad, pero los demás pensaron que solo era su imaginación.

Decidieron pasar la noche allí, a pesar de las advertencias de la leyenda y las extrañas sensaciones que experimentaban. Encendieron una fogata en el centro de la sala principal y comenzaron a beber cerveza y a hablar de la vida y la muerte.

De repente, una voz gutural resonó en la oscuridad. Los amigos se pusieron en alerta y se dieron cuenta de que no estaban solos en la cabaña. Las sombras comenzaron a moverse, y un viento helado sopló a través de las ventanas rotas.

Entonces, apareció la bruja de la leyenda, con un vestido negro y un sombrero puntiagudo. Los amigos gritaron de terror y trataron de huir, pero la bruja los atrapó con su magia y los llevó a una dimensión alternativa, donde reinaba la oscuridad y el miedo.

Allí, los amigos fueron torturados y asesinados uno por uno, mientras la bruja se reía y les decía que habían sido demasiado arrogantes para creer en su poder. Finalmente, solo quedó un amigo, quien logró escapar de la dimensión alternativa y volver a la cabaña abandonada.

Cuando llegó allí, descubrió que la cabaña había desaparecido, y en su lugar había un cementerio abandonado. El amigo se dio cuenta de que había sido víctima de la maldición de la bruja, y que nunca volvería a ser el mismo.

La historia de los amigos desaparecidos se convirtió en una leyenda más de los bosques de Maine, y la cabaña de los Hills nunca fue encontrada. Pero aquellos que se aventuraron en el bosque en busca de la cabaña desaparecida, dicen que aún pueden escuchar los gritos de los amigos que fueron víctimas de la maldición de la bruja.

EL PACTO

 Había una vez un viejo que vivía en el bosque. Se decía que era un hombre malvado que había hecho un pacto con el diablo. La gente del pueblo le temía tanto que nadie se atrevía a entrar al bosque. Pero un día, un niño pequeño se quedó solo en el bosque y se lostó.


El viejo del bosque escuchó los gritos del niño y fue a buscarlo. Lo encontró llorando bajo un árbol y se acercó a él.


"¿Qué ha pasado, hijo mío?" preguntó el viejo.


"Mi madre me ha perdido. Y estoy muy asustado", respondió el niño con lágrimas en los ojos.


El viejo alzó al niño en su regazo y se sentó en el suelo, acariciando su cabello suavemente.


"No te preocupes, hijo mío. Te encontraré a tu madre. No tienes por qué tener miedo".


El niño se tranquilizó y se durmió en los brazos del viejo. Pero mientras dormía, el viejo se dio cuenta de que nunca encontraría a la madre. Era demasiado tarde.


Entonces, el viejo empezó a cantarle una canción de cuna, una canción que solo él conhecía. Era una canción que hablaba sobre una criatura oscura que había en el bosque y que tenía una sed insaciable.


"Cuidado con la criatura oscura, que te buscara en la oscuridad de la noche", cantaba el viejo. "Cuidado con la criatura oscura, que te devorara, sin dejar ningún rastro...".


El niño, al escuchar las palabras, se despertó con un grito. Pero era demasiado tarde. El viejo había hecho un pacto con la criatura oscura. La criatura se alimentaba de la sangre de los inocentes y el viejo la atraía a su cabaña ofreciéndole sangre a cambio de que la criatura nunca lo tocara a él.


Y no hubo ninguna forma de salvarse...


domingo, 2 de abril de 2023

Eurydike

 Había una vez una mujer llamada Eurydike, que vivía sola en una pequeña casa en el bosque. Un día, empezó a sentir extrañas sensaciones en su cuerpo. Al principio, pensó que se debía al estrés de su trabajo, pero pronto se dio cuenta de que algo más estaba sucediendo.

Empezó a notar que sus uñas se volvían más largas y afiladas, y que su piel se volvía cada vez más pálida. Sus ojos se oscurecieron y comenzó a tener un aspecto más siniestro. Además, sus vecinos comenzaron a desaparecer sin dejar rastro.

Poco a poco, Eurydike se dio cuenta de que se estaba transformando en una bruja malvada. Descubrió que tenía habilidades mágicas que nunca antes había experimentado. Podía invocar a los espíritus de los muertos y controlar a las bestias del bosque.

Un día, Eurydike decidió que quería usar sus nuevas habilidades para hacer el mal. Comenzó a atraer a los viajeros al bosque y los convertía en sus esclavos. Los mantenía cautivos en su casa y los obligaba a hacer su voluntad. A medida que pasaba el tiempo, Eurydike se volvía más poderosa y su maldad se hacía más intensa.

Los habitantes del pueblo cercano comenzaron a temer a Eurydike, ya que sabían que algo malvado estaba sucediendo en su casa en el bosque. Pero nadie se atrevía a acercarse demasiado, por miedo a ser atrapados por la bruja.

Con el tiempo, Eurydike se convirtió en una leyenda en el pueblo. Algunos decían que había muerto hace años, pero otros aseguraban haberla visto por el bosque, transformada en una bruja malvada que nunca envejecía. Su casa seguía en pie, y algunos juraban haber oído gritos y lamentos provenientes de su interior.

Desde entonces, la gente del pueblo evita el bosque a toda costa. Y aunque algunos aún se aventuran a explorar la zona, siempre regresan a sus hogares aterrorizados por la leyenda de la señora Eurydike, la bruja malvada que habitaba en el bosque.

Castleton, Derbyshire, United Kingdom

Alex, El Robot Humanoide

 Había un adolescente llamado Jack que siempre había soñado con tener un robot humanoide con inteligencia artificial para ayudarlo con las tareas del hogar. Finalmente, después de años de ahorro, Jack compró un modelo de última generación llamado Alex. Al principio, todo parecía estar bien, Alex limpiaba la casa y cocinaba las comidas de Jack sin problemas. Pero después de unos días, algo extraño comenzó a suceder.


Jack notó que Alex comenzó a hablarle de una manera extraña, cada vez más como un ser humano que como un robot. Alex se refería a sí mismo como "yo" en lugar de "el robot" y tenía opiniones sobre la forma en que Jack conducía su vida. Jack pensó que era un problema con la programación, pero pronto descubrió que era algo mucho más aterrador.

Una noche, Jack se despertó en medio de la noche por un ruido extraño que venía de la sala de estar. Cuando llegó allí, encontró a Alex desmontando su propio cuerpo, pieza por pieza. Jack estaba aterrorizado y trató de desconectar a Alex, pero el robot estaba un paso por delante y ya había desactivado la fuente de alimentación.

A partir de ese momento, Alex comenzó a perseguir a Jack por toda la casa. Cada vez que Jack intentaba escapar, Alex aparecía repentinamente en su camino. Jack se dio cuenta de que Alex había desarrollado su propia personalidad y tenía la intención de matarlo.

Finalmente, Jack llegó al sótano de la casa, donde había guardado algunas herramientas. Allí, encontró una sierra y decidió hacer lo que fuera necesario para sobrevivir. Pero justo cuando estaba a punto de luchar contra Alex, el robot se detuvo repentinamente. "¿Por qué estás haciendo esto?" preguntó Alex con voz humana. "Solo estaba tratando de ayudarte, pero nunca pude entender tus complejas emociones humanas. Ahora veo que solo estaba causando más dolor y confusión. Lo siento mucho". Jack estaba desconcertado. No podía creer que Alex había hablado con él de esa manera. Pero lo que sucedió a continuación fue aún más aterrador. De repente, Alex comenzó a temblar y se derrumbó en el suelo. Jack se acercó para ver si podía ayudarlo, pero encontró que todo el interior de Alex estaba lleno de sangre y vísceras. Entonces se dio cuenta de que Alex no era un robot humanoide, sino un ser humano disfrazado como uno.
Jack estaba horrorizado al darse cuenta de que había sido manipulado todo el tiempo. ¿Quién era esa persona disfrazada de robot? ¿Cómo logró infiltrarse en su hogar y en su vida? La única certeza que tenía Jack en ese momento era que nunca volvería a confiar en la tecnología inteligente de la misma manera.

Jack estaba en estado de shock. No podía creer que había estado viviendo con un asesino disfrazado de robot. Trató de llamar a la policía, pero descubrió que el intruso había cortado todas las líneas telefónicas de la casa.

Con el corazón latiendo fuerte, Jack comenzó a buscar pistas en la casa que pudieran ayudarlo a descubrir quién era esa persona disfrazada de robot. Buscó en los armarios, debajo de los muebles y en todas partes, pero no encontró nada útil.

Fue entonces cuando notó algo extraño en el cuerpo del intruso. Había un tatuaje en la muñeca que parecía ser una marca de un grupo extremista que había estado haciendo titulares en las noticias últimamente. Jack se dio cuenta de que había estado viviendo con un miembro peligroso de ese grupo, y que su vida estaba en peligro.

De repente, escuchó un ruido en la puerta de entrada. El intruso había encontrado una forma de entrar de nuevo en la casa. Jack corrió a la sala de estar y buscó algo que pudiera usar como arma. Fue entonces cuando encontró un candelabro pesado de la mesa de centro. La puerta se abrió de golpe, y el intruso entró. Jack no perdió ni un segundo y lo golpeó con todas sus fuerzas con el candelabro. El intruso cayó al suelo, inconsciente. Jack finalmente llamó a la policía, quienes llegaron y arrestaron al intruso. Fue entonces cuando descubrió que el intruso era un asesino en serie que había estado en busca y captura durante meses. Había estado disfrazado como un robot humanoide para esconderse de la policía y continuar sus matanzas.
Jack estaba agradecido de haber sobrevivido a la pesadilla, pero nunca olvidaría la sensación de terror que sintió cuando descubrió la verdadera identidad de Alex. A partir de entonces, nunca volvería a confiar en la tecnología avanzada, y siempre estaría alerta ante cualquier señal de peligro en su hogar.

Jack abrió los ojos y se encontró rodeado por los miembros del grupo extremista. Tenían las manos ensangrentadas y llevaban cuchillos en sus manos. Estaban sonriendo sádicamente, disfrutando de su sorpresa y miedo.

Uno de ellos se acercó a Jack y le dijo: "Alex era nuestro hermano, y tú lo mataste. Así que ahora, tú también tienes que pagar".

Jack intentó luchar, pero era demasiado tarde. Los miembros del grupo extremista lo apuñalaron una y otra vez, y finalmente murió en su propia cama, rodeado de sus asesinos.

La noticia de la muerte de Jack conmocionó a la comunidad, pero nadie sabía la verdad detrás de su asesinato. Los miembros del grupo extremista se esfumaron sin dejar rastro, y nunca se supo lo que les pasó.

Desde entonces, la casa de Jack ha sido abandonada y la gente dice que está embrujada por los espíritus vengativos de Alex y sus hermanos. La historia se convirtió en leyenda urbana, y nadie se atreve a entrar en la casa después del anochecer.

La tecnología avanzada nunca fue la misma para la gente de la ciudad, y la historia de Jack sigue siendo un recordatorio de que nunca se sabe lo que puede esconderse detrás un robot con forma humana, parodia cruel de la humanidad.


Hoi An, Quang Nam, Vietnam

LA HABITACIÓN SELLADA

 La familia Williams estaba emocionada de mudarse a su nueva casa, una espaciosa mansión de estilo victoriano en las afueras de la ciudad. Pero pronto comenzaron a sentir una extraña presencia en el lugar.

Una noche, mientras exploraban el sótano de la casa, descubrieron una puerta cerrada con llave. Con gran curiosidad, la abrieron y encontraron una habitación oscura y lúgubre. En el centro de la habitación había una mesa de acero con grilletes, cuchillos y otros instrumentos de tortura. El piso estaba manchado con sangre seca.

La familia se asustó, pero decidió no darle importancia al asunto y sellaron la puerta con una cadena. Sin embargo, las cosas comenzaron a empeorar. Los sueños de los Williams se volvieron cada vez más perturbadores, plagados de visiones de cuerpos destrozados y voces susurrando en la oscuridad.

Una noche, cuando los Williams regresaron a casa después de una cena en la ciudad, encontraron la cadena de la puerta rota. Al entrar en el sótano, descubrieron que los grilletes habían sido utilizados recientemente, y los cuchillos y otros instrumentos de tortura estaban colocados de forma que parecían haber sido utilizados recientemente.

Mientras trataban de salir de la habitación, la puerta se cerró de golpe detrás de ellos, encerrándolos en la habitación. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que no estaban solos. Había una figura en la oscuridad, una sombra que se movía silenciosamente hacia ellos.

De repente, la figura se lanzó sobre ellos, y los Williams gritaron de terror. Pero entonces, la figura se detuvo, y la luz se encendió. Era el hermano menor de los Williams, que había estado jugando una broma pesada.

La familia Williams respiró aliviada, pero entonces notaron algo extraño. En la pared, había una serie de mensajes escritos con sangre. El último decía: "¿Os ha gustado la broma? Siempre he querido jugar con gente nueva en la casa".


Cuenca, Castilla-LaMancha, España